Devocional
Lunes 01 DE JULIO DE 2024
Para servirle mejor
1 Corintios 7:1-7
Muchos piensan que hay dos grupos de creyentes, los que se toman las cosas del Señor en serio y se han propuesto servirle de todo corazón, y todos los demás. Pablo no tenía ese criterio.
Exposición
Abordamos el cap. 7 que el Apóstol está mirando a cada creyente como alguien consagrado a servir al Señor y que además lo hace con la expectativa de su venida. Por otra parte, no sabemos qué cosas le escribieron los corintios (v. 1), y hemos de ver su enseñanza teniendo en cuenta también lo que escribió en otras cartas. Si ser soltero es bueno (lit. kalon), el celibato no constituye un estado superior al del matrimonio, y el estar casado es lo normal. Los corintios, igual que nosotros, vivían en una sociedad muy erotizada. Ser soltero sin tener don de abstinencia conllevaba y conlleva un serio riesgo de caer en fornicación u otro tipo de inmoralidad sexual. Así que es mucho mejor andar en orden, que cada cual tenga su cónyuge, y esto no como un parche, un mal menor, sino según los sublimes principios que el propio Apóstol desarrolla en Ef. 5:22-33. Si Pablo pensara en el matrimonio como un mal menor no hubiera escrito los vv. 3-5. El clásico: hoy no me apetece,… hoy me duele la cabeza,… hoy estoy cansado/a,… puede ser una acción egoísta que prive al cónyuge, a ambos, de un derecho y una fuente de comunicación íntima que en esencia son regalos de Dios. También combate Pablo la “superespiritualidad” que entiende que la abstención hace más espiritual al matrimonio. Si es para ocuparse sosegadamente en la oración, vale; pero por algún tiempo y volviendo a la normalidad para no ser tentados a causa de la incontinencia.
Aplicación
En el texto de Efesios citado arriba, Pablo dice que la relación entre los cónyuges creyentes ha de tener como modelo la relación que hay entre Cristo y la Iglesia. No puede ponerse el matrimonio cristiano a un nivel de mayor dignidad. Solemos pensar que lo más normal es que todos los cristianos se casen. Lo cierto es que hay pocos creyentes que hayan conocido el evangelio como solteros y se planteen con integridad delante del Señor si ese es para ellos o no el estado en el que le puedan servir con más dedicación.
Pensamiento: … para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos. (2 Co. 5:15)
Unión Bíblica “Notas Diarias” Por : Alberto Arjona
Martes 02 DE JULIO DE 2024
Consejos para todos
1 Corintios 7:8-16
Nunca han sido fáciles de resolver los temas relacionados con el estado civil de los creyentes ni con los conflictos matrimoniales, ni en el primer siglo ni en el siglo XXI.
Exposición
Para solteros y viudas (vv. 8-9). Pablo tenía don de continencia y aconseja a todos aquellos que también lo tuvieran que sería bueno que se quedaran como él. La finalidad no es otra que la de servir al Señor sin las ataduras propias de un hogar.
Para casados (vv. 10-11). Es muy posible que hubiera casos de matrimonios en la congregación que estuvieran pasando por problemas en los que hubiera riesgo de ruptura. Pablo no se apoya en la legislación romana ni en las interpretaciones rabínicas al respecto. Da las normas que había dado el Maestro. Eso es lo que quiere decir la expresión “mando, no yo, sino el Señor” (v. 10). Conocía bien la enseñanza de Jesús. Así que no nos extrañe la rotundidad de la doctrina: que la mujer no se separe del marido,… que el marido no abandone a su mujer. Y aunque en la sociedad grecorromana el marido tenía la prerrogativa de divorciar (sentido de echar) a la esposa, Pablo dice que el Señor no lo permite. Y si es la esposa la que toma la iniciativa para la separación y la llega a consumar, que no se vuelva a casar. La razón es contundente: se cerrarían las puertas de una posible reconciliación.
Matrimonios mixtos (vv. 12-16). Es un consejo del Apóstol muy en consonancia con la ética cristiana. Si uno de los cónyuges es incrédulo pero consiente en seguir adelante con el matrimonio, por amor al cónyuge y por amor a los hijos, el esposo o esposa creyente debe aceptar y no debe privar de toda la influencia que puede llevar a los miembros de su familia a la salvación. Es quizás el camino difícil pero también el de muchas posibilidades de bendición familiar.
Aplicación
Cada divorcio es una tragedia que afecta no solo a los cónyuges sino a todo su entorno familiar y aun social. Causa un gran perjuicio y Dios lo aborrece (Ma1.2:16). No podemos hacer la vista gorda ante un divorcio. Si es en el seno familiar, lucharemos; si es en el seno de la iglesia ayudaremos orando por nuestros hermanos afectados y por los guías que han de darles consejo.
Pensamiento: De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él. (1 Co.12:26)
Por : Alberto Arjona
Miércoles 03 DE JULIO DE 2024
Cada cual en su lugar
1 Corintios 7:17-24
Dios llama a personas únicas e irrepetibles. Nuestra genética, el tiempo en que nos ha tocado vivir, nuestro entorno, todo está bajo el control soberano de Dios (Hch.17:26).
Exposición
En el v.15 contemplamos la posibilidad de ruptura matrimonial si el creyente incrédulo decide separarse. Por si alguien tuviera la tentación de extender esta posibilidad a otro tipo de situaciones, Pablo es muy claro: que cada uno permanezca en el estado que tenía cuando fue llamado. Los solteros, con don de continencia, que sigan solteros; los casados que sigan casados. Esto, que es lo que enseña en todas las iglesias, lo amplía también a la condición social, para lo cual pone dos ejemplos. El primero está sacado del ámbito religioso. En Corinto convivían en la iglesia judíos y gentiles, los primeros circuncidados y los segundos no. Algún gentil podría pensar que circuncidarse lo haría más completo espiritualmente; y viceversa, algún judío para reafirmar su nueva posición en Cristo podría tener la tentación de ocultar quirúrgicamente su circuncisión. ¡Que cada uno se quede como esté! La circuncisión importante es la del corazón, la de la obediencia (v. 19). El segundo ejemplo tiene que ver con haber recibido el evangelio siendo esclavo o libre. ¿Debería un esclavo buscar la libertad por todos los medios como primer objetivo? Pablo dice que no se preocupe, que eso no es lo más importante (v. 21a), aunque aconseje aprovechar la oportunidad, si la tuviera, para ser libre. De paso nos da una excelente lección para que reflexionemos: cuando se trata de creyentes, el esclavo es libre en Cristo y el libre esclavo de Cristo.
Aplicación
No hemos recibido el evangelio por casualidad. Dios en su soberanía, y por el conocimiento anticipado que tiene de todas las cosas, nos apartó por el Espíritu Santo cuando a Él le plugo en el momento de unas circunstancias concretas de nuestra vida: mi estado civil, mi familia, mis vecinos, mis amigos, mis compañeros de trabajo o de estudios. Dios me quiere ahí, aprovechando las ocasiones, lo cual no quiere decir que se acabaron los proyectos en la vida, todo lo contrario.
Pensamiento: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti. (Mr 5:19)
Por : Alberto Arjona
Jueves 04 DE JULIO DE 2024
Viviendo "como si no"
1 Corintios 7:25-40
Continuamos desarrollando el principio del v. 24: Cada uno, hermanos, en el estado en que fue llamado, así permanezca con Dios.
Exposición
Pareciera que Pablo está tan convencido de la inmediatez de la venida del Señor que insta a los corintios a vivir corno sí fueran los últimos instantes de su vida terrenal, pero no es así. 41:1 Se entrelazan dos conceptos que hemos de tener en cuenta: la expresión del v. 26, la necesidad que apremia, y la del v. 29, el tiempo es corto. En cuanto a la primera, la palabra utilizada (ananglao) nunca se usa para describir los acontecimientos que precederán a la segunda venida. Se ha traducido como “presente apretura”, “actual crisis”, “calamidad que se viene encima” o “tribulación inminente”, lo que nos lleva a pensar en una situación mala, muy específica, que se veía venir en Corinto. No sabemos de lo que se trataba. En esa situación habría que evitar añadir más tribulación. Pero dicho esto, Pablo enlaza con un principio esencial para vivir la fe y que tiene que ver con la era en que vivimos (v. 29). No habla del tiempo cronológico (kronos) sino del momento, la época, el período (kairos) que vivimos. Se trata de abandonar la perspectiva pagana del tiempo y tener en consideración que el Reino de Dios ha invadido este mundo, subordinar lo pasajero a lo eterno aun en lo más fundamental. Así que en ninguna manera está diciendo que pueden desatenderse las obligaciones familiares o cosas por el estilo (1Ti. 5:8). Como puede verse, en los vv. siguientes el Apóstol trata con exquisito respeto las decisiones de cada cual en cuanto a casarse o no. Solamente les lleva a reflexionar que el matrimonio exige un gran esfuerzo que puede restar eficacia en cuanto a un servicio más pleno para el Señor.
Aplicación
Vivir “como si no” exige entender que ninguna persona, cosa o situación puede ser una finalidad en sí misma. Se trata de mirar el matrimonio, los hijos, la aflicción, el gozo, las posesiones, el trabajo, todo a la luz de la nueva era que por fe vivimos de forma anticipada. Este presente siglo malo está pasando, el Reino de Dios ha irrumpido y toca todos los aspectos de nuestra vida
Pensamiento: Nos pueden despojar de bienes, nombre, hogar, el cuerpo destruir, mas siempre ha de existir de Dios el reino eterno. (Martín Lutero)
Por : Alberto Arjona
Viernes 05 DE JULIO DE 2024
Conocimiento y amor
1 Co. 8:1-13
Entre los asuntos consultados a Pablo estaba lo relacionado con la legitimidad o no de comer carnes procedentes de sacrificios a ídolos. Las posiciones tenían origen en preferencias humanas de fuertes y débiles, que no edificaban.
Exposición
El problema planteado. La idolatría saturaba la vida cotidiana de romanos y griegos. Los sacrificios a ídolos tanto en fiestas personales como en las locales y nacionales, eran continuas. Los sobrantes de los sacrificios se consumían por los amigos invitados o se vendían en las carnicerías. Dos campos se contraponen: el conocimiento, que llena de vanagloria, y el amor que busca la ayuda de todos (v. 1). No hay mayor evidencia de ignorancia que presumir de sabio. Parafraseando a Pablo: “Si alguno piensa que ya alcanzó todo el conocimiento, aún no empieza a saber nada como conviene” (v. 2). En la respuesta, el apóstol reconoce que todos los cristianos creen que solo hay un Dios y que los ídolos son nada (v. 4). El conocimiento debía llevar a todos a considerar sin importancia que la carne viniera de los sacrificios, pero no todos eran capaces de aplicarlo a la vida cotidiana (v. 7). El cristiano tiene un límite a su libertad, que termina donde empieza el tropiezo a los débiles. Reconociendo que tenían derecho a comer libremente, les indica que no permitan que su derecho sea causa de pecado para sus hermanos débiles (v. 9). Luego les indica el camino excelente que es el del amor, que evita aquello que siendo lícito pueda ser ocasión de escándalo para un hermano débil (v. 13).
Aplicación
Los límites de esta actuación no son para legalistas, deseosos de imponer sus estrechos criterios. Esos no son hermanos débiles, sino voluntariosos que desean que todos se dobleguen a sus puntos de vista (Col. 2:20-23). Tal actuación es tiranía, contra lo que se debe estar en guardia. La actitud de todos, especialmente de los fuertes ha de ser de amor edificante y no de arrogancia destructiva.
Reflexión: Ser libre es hacer lo debo y no lo que quiero.
Unión Bíblica “Notas Diarias” Por : Samuel Pérez Millos
Sábado 06 DE JULIO DE 2024
Derechos y renuncias
1 Co. 9:1-18
Los derechos que asisten a Pablo como apóstol son apoyados bíblicamente en el pasaje, estableciendo el compromiso eclesial del sostenimiento a los que sirven a pleno tiempo.
Exposición
La defensa de una acusación. Algunos acusaban a Pablo de buscar un beneficio personal en la fundación de las iglesias (v. 3). Mediante una serie de preguntas retóricas que exigen una respuesta afirmativa, se presenta como apóstol de Jesucristo, con las señales que lo confirmaban (vv. 1-2). Como tal tenía derecho a ser sustentado por la iglesia (v. 4). Igualmente podría llevar consigo a su esposa, como hacían los demás apóstoles, los hermanos del Señor y Pedro (v. 5). Tanto él como Bernabé, su compañero en el ministerio, no tenían menos derechos que el resto de los apóstoles (v. 6). Como ejemplos ilustrativos del derecho a recibir sustento de las iglesias, habla del soldado, que no tiene que ocuparse de su comida, porque la recibe del ejército; del labrador, que come del resultado de su trabajo; del pastor que toma la leche como recompensa del cuidado pastoral (v. 7). Pablo estaba involucrado en estas tres áreas en el servicio de Cristo, por tanto tenía estos mismos derechos. Apela también a la ley que establece un mandato para que no se le ponga bozal al buey que trilla, aplicándolo con mayor razón a quien sirve al Señor a pleno tiempo (vv. 9-10). Sin embargo el derecho queda supeditado a lo que es mejor para la obra, a fin de que nadie pueda, basado en eso, desprestigiar su ministerio (v. 12). Pero el mandato divino es firme: los que anuncian el evangelio que vivan del evangelio (v. 14). El galardón por el trabajo es otro, que pueda presentar gratuitamente el evangelio de Cristo.
Aplicación
El que sirve al Señor a pleno tiempo debe ser sustentado por los creyentes. No se trata de dar limosna sino de obedecer al mandato de Jesús. Los creyentes deben ser enseñados a ofrendar para la obra del Señor. Hay pastores y misioneros que pasan estrecheces por el desinterés de los creyentes.
Oración: Señor ayúdame a orar y ofrendar para tu obra.
Por : Samuel Pérez Millos
Domingo 07 DE JULIO DE 2024
Corriendo bien
1 Co. 9:19-27
La vida cristiana es una carrera con reglas establecidas que han de ser guardadas para alcanzar la victoria.
Exposición
Una forma de comportamiento. Aunque libre, el apóstol se hace siervo de todos con un objetivo: ganar al mayor número (v. 19). Sin claudicar en ningún punto de la doctrina, se comportaba como judío con los que lo eran, y del mismo modo con los gentiles, pero siempre manteniéndose dentro de la ley de Cristo, distinguiendo tres estados morales: Una vida sin ley la de los que no conocen a Dios; una vida bojo lo ley, de los judíos; una vida en la ley propia de los cristianos (vv. 20-21). Él también se identificó con los débiles, los demasiado escrupulosos. Su objetivo era ganar o todos; a unos para Cristo y a otros para no herir su conciencia (vv. 22-23). No es como el fin que justifica los medios, sino como el adaptarse en manifestación de amor. No era volver a la ley judía, ni al libertinaje gentil, sino a aquello que un cristiano podía aceptar. Este ejemplo manifiesta un estilo de vida que compara con el modo de practicar un deporte. Los que corrían o los que luchaban debían hacerlo ajustándose a las normas, para que pudieran conseguir el premio (vv. 24-25). El apóstol corría con la mira puesta en la meta; luchaba sin dar golpes inciertos; golpeaba su cuerpo en el sentido de limitarlo a cosas lícitas y convenientes, renunciando a sus derechos (v. 26). La razón final es que no sea eliminado, no de la salvación, sino del premio en la carrera (v. 27).
Aplicación
La sociedad actual es muy diversa, con comportamientos distintos y orientaciones varias. El creyente no puede mantenerse al margen de ella si quiere alcanzar al mayor número para Cristo. Pablo asistía a la sinagoga en donde se negaba la deidad y la resurrección de Cristo. Para algunos su presencia allí sería hoy escandalosa, pero él ganaba a muchos para el Evangelio, predicándolo en donde se encontraban. Solo acercándose a los pecadores podremos llevarlos a Cristo.
Reflexión: Corramos de modo que alcancemos el premio.
Por : Samuel Pérez Millos
Lunes 08 DE JULIO DE 2024
Ejemplos para nosotros
1 Co. 10:1-13
Transgredir la voluntad de Dios es caer en pecado, y el pecado, aun el del creyente, trae siempre la disciplina de Dios.
Exposición
Historia. Hay mucha similitud entre la historia de Israel y la problemática de la iglesia. El apóstol recurre a ella, recordando algunos de sus privilegios: Habían sido guiados por Dios (v. 1); atravesaron el Mar Rojo en seco (v. 2); fueron alimentados con maná y provistos de agua durante su peregrinación (vv. 3-4). Pero la mayor parte de ellos perecieron bajo el juicio de Dios (v. 5).
Ejemplo. Estos ejemplos son tomados por Pablo como advertencia para nosotros, a fin de que no caigamos en pecado como ellos (v. 6). Entre los que cita para hoy está la idolatría, que es poner el corazón en tesoros temporales y no en Dios; el de inmoralidad, prohibido por Dios en todos los tiempos, con juicio para quienes los practican (He. 13:4); el de tentar a Dios, poniendo a prueba su paciencia, fidelidad o poder; la murmuración, especialmente grave cuando se difama a instrumentos que Dios usa en su obra, como manifestación de envidia (vv. 7-10). Con la historia se advierte al creyente del riesgo de cometer o persistir en el pecado. Dios no será siempre paciente (Sof. 1:12) (v. 11). La falsa seguridad de no caer en la tentación se apoya en la presuntuosa confianza de las fuerzas propias (v. 12). Sin embargo Dios, que advierte también, alienta con su fidelidad; no permitirá una tentación insuperable, sino que abrirá las puertas para dar salida al cerco de la prueba (v. 13).
Aplicación
Toda la actuación de Dios está regulada por su fidelidad que no h permitirá una situación de prueba mayor que las fuerzas para soportarla. No tenemos promesa de que nuestras pruebas sean eliminadas, pero sí de la gracia suficiente para transitar por ellas y mantenerse firme aun en medio de la adversidad. La gracia que salva, fortalece, santifica y da seguridad. A pesar de nuestras faltas, vivimos rodeados del amor de Dios.
Promesa: Pero Él da mayor gracia (Stg. 4:6).
Por : Samuel Pérez Millos
Martes 09 DE JULIO DE 2024
El mal uso de la libertad
1 Co. 10:14-22
Los corintios estaban en peligro de llegar a límites en el uso de la libertad que los introdujese en una esfera de pecado.
Exposición
El mejor método para no caer en el pecado de la idolatría está en huir de ella (v. 14). Los lectores debían usar correctamente su forma de pensar, juzgando como correcta la enseñanza del apóstol (v. 15). En la participación de la Cena del Señor, representa la sangre de Cristo vertida para salvación, y el pan su cuerpo muerto para darnos vida. Al participar de los símbolos se manifiesta la participación por fe con el cuerpo y la sangre del Señor, conformando la unión espiritual con Él por medio de su obra (vv. 16-17). De la comunión con el Señor se desprende la comunión con los hermanos que formamos un cuerpo en Él (v. 17). Tomando el ejemplo de Israel recuerda que los que participaban del sacrificio eran partícipes del altar, estaban en comunión con Dios y se hacían adoradores de Aquel a quien estaban consagrando el altar (v. 18). Así los que participaban en un sacrificio idolátrico, aunque el ídolo en sí no era nada, los demonios se escondían tras el ídolo, así que quien participaba del sacrificio, sin saberlo, estaba adorando a los demonios (vv. 19-20). Esto conlleva una imposibilidad, la de participar en mesas opuestas y en relaciones imposibles provocando a celos al Señor (Stg. 4:4). Con la idolatría se provoca la ira de Dios. Le temeridad es grande puesto que nosotros no somos más fuertes que Él, y no podremos detener su juicio (vv. 21-22).
Aplicación
No se trata de lo que el creyente se proponga hacer, sino de lo que realmente hace. No es su intención lo que vale, sino el efecto y alcance de su conducta. Cuando se asiste a algo donde no se puede dar gloria a Dios, se forma una unidad con los que participan y se cae con ellos en el mismo pecado. Estar presentes en actos marcadamente opuestos a la voluntad de Dios, es manifestar una identificación con el propósito que los mundanos tienen para llevarlo a cabo.
Reflexión: Hemos sido llamados a libertad, pero no para usarla como pretexto para hacer lo que no glorifica a Dios.
Por : Samuel Pérez Millos
Miércoles 10 DE JULIO DE 2024
Los objetivos del creyente
1 Co. 10:23-11:1
La vida cristiana tiene un propósito y unos objetivos relacionados con los hermanos, con el testimonio y con Dios.
Exposición
En relación con los hermanos (10:23-26). Las acciones del creyente pueden ser lícitas, pero no todas son convenientes. La libertad está limitada a hacer lo que conviene, que es lo que edifica (v. 23). El verdadero amor es el que busca la bendición de los hermanos antes que los privilegios propios (v. 24). Por amor al hermano se establece la renuncia a la propia vida (1 Jn. 3:16b). El cristiano podía comprar carne en el mercado pero no debía preguntar la procedencia para comerla a causa de la conciencia (vv. 25-26).
En relación con el testimonio (10:27-30). El creyente que es invitado a un acto social por un incrédulo, es libre para aceptar la invitación (v. 27) -Jesús aceptaba invitaciones a fiestas sociales, compartía la mesa con publicanos, aceptaba invitaciones de los fariseos-, pero si le informaban que era en honor a un ídolo, no debía comer (vv. 28-30).
En relación con Dios (10:31-11:1). La gloria de Dios es la meta en todo acto del cristiano (v. 31). La vida que le glorifica es aquella en que las acciones e intereses coinciden con los de Cristo. Una acción incorrecta puede ser causa de tropiezo a otros, especialmente grave con los “niños en Cristo” (Mr. 9:42). Nadie debe ser escandalizado por lo que un cristiano hace, de lo que Pablo daba ejemplo (vv. 32-33). El apóstol seguía a Cristo en todo cuanto hacía (11:1).
Aplicación
En ocasiones nos sentimos rebajados cuando tenemos que ceder de nuestros derechos en beneficio de otros. Sin embargo el gran ejemplo para el comportamiento cristiano es Cristo mismo. Sus derechos divinos eran inalienables, pero siendo Dios se despojó a sí mismo para buscar el bien de quienes no teníamos ningún derecho para ser amados. Nuestra bendición es la de estar bajo el mismo sentir que hubo en Cristo Jesús, como demanda la identificación con Él (Fil. 2:5).
Reflexión: El único modo seguro de vida cristiana es vivir con los ojos puestos en Jesús.
Por : Samuel Pérez Millos
Jueves 11 DE JULIO DE 2024
El atavío en el culto
1 Co. 11:2-16
En la iglesia se producían desórdenes en el culto, entre los que estaban el atavío incorrecto de hombres como de mujeres.
Exposición
Preparación (v. 3). Pablo presenta el orden en cuanto a comunicación de vida. La del varón procede de Cristo, en quien está la vida (Jn. 1:4); la de la mujer viene del varón de quien fue tomada; la de Cristo procede de Dios, aunque no como origen de vida divina. Esto establece un orden de dependencia pero no tanto de jerarquía.
El problema. En el culto, hombres y mujeres oraban y profetizaban de un modo incorrecto. Pablo enseña que el hombre no debe cubrir su cabeza y la mujer no debe hacerlo sin cubrirla. Pero no aclara como debe entenderse esta cobertura, al usar el verbo cubrir con modificaciones que hacen difícil la traducción (vv. 4-5). Basándose en el principio anterior, da las razones de la enseñanza vinculándola con los propósitos en la creación del varón y de la mujer. En todos los textos griegos se lee: lo mujer debe tener autoridad sobre su cabezo y en ninguno de ellos está la palabra señal (vv. 7-9). La correcta forma de participar en el culto, Dios la usa para instrucción de los ángeles, mostrándoles la acción de la gracia en los creyentes (v. 10).
Entorno social y dimensión doctrinal. Pablo llama a tomar una posición sobre esto: juzgad vosotros, y hace referencia al entorno social, preguntando si era propio que el hombre tuviese largo el cabello y la mujer corto (vv. 14-15). Lo que entonces exigiría como respuesta un no, hoy permite con toda honestidad un si, ya que no es problema que el hombre use el cabello más largo y que la mujer corte el suyo. Por eso debe considerarse como doctrina general y no como fundamental ya que admite distintas interpretaciones.
Aplicación
Dios nos llama a respetar a quienes piensen de forma diferente a la nuestra. Pero no debemos olvidar un mandato fundamental: solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de lo paz.
Reflexión: Ninguno busque su propio bien sino el del otro.
Por : Samuel Pérez Millos
Viernes 12 DE JULIO DE 2024
Abusos peligrosos
1 Co. 11:17-34
Otro de los desórdenes que se producían en la iglesia era la participación indignamente en la Cena del Señor.
Exposición
Problemas. El primer problema tenía que ver con las divisiones que se manifestaban en grupos dentro de la iglesia, de lo que había sido informado el apóstol (1:11-12). Estas divisiones manifestaban quienes eran creyentes espirituales y quienes carnales (vv. 17-19). La reunión eclesial iba precedida del ágape, en que cada uno aportaba algo de comida y se compartía entre todos. Las divisiones se apreciaban en el egoísmo de comer coda uno su propio ceno. Los hermanos pobres quedaban con hambre, mientras los ricos comían y bebían más de lo necesario (vv. 20-22). El apóstol les recuerda el significado de la Cena del Señor, donde el pan representa el cuerpo de Cristo entregado para salvación y el vino es símbolo de su sangre que sella el nuevo pacto. Cuantas veces se repitiese la ordenanza debía hacerse en memoria del Señor, proclamando su muerte (vv. 23-26). El peligro estaba en celebrar la Cena del Señor indignamente. Esto se producía cuando no se discernía el cuerpo del Señor, es decir, la iglesia y su unidad. Participar de ella siendo parte de una división en la iglesia, es hacerlo indignamente, acarreando juicio sobre sí, de modo que muchos estaban enfermos, otros debilitados y otros habían muerto (vv. 27-30). El modo de evitar la disciplina era mediante un examen personal que condujese a una confesión y cambio de actitud.
Aplicación
Todos los cristianos formamos parte del único cuerpo en Cristo que es su iglesia. Las acciones que afectan a la unidad es una lucha directa contra el propósito de Jesús: Que sean uno, y se levanta contra la unidad hecha por el Espíritu de todos los creyentes en Cristo. Tal acción es contraria al testimonio ante el mundo, por lo que Dios ha dejado ejemplo de que acarrea juicio sobre quienes causen esas divisiones.
Reflexión: ¿Estoy comprometido con la unidad de la iglesia?
Por : Samuel Pérez Millos
Sábado 13 DE JULIO DE 2024
Dones espirituales
1 Co. 12:1:11
La iglesia en Corinto tenía muchos creyentes con abundancia de dones (1:5), pero tenían algunos problemas en su uso.
Exposición
Dones, diversidad y procedencia. El apóstol deseaba que conociesen bien la razón y el funcionamiento de los dones espirituales, para un ejercicio correcto de los mismos. Los dones son una dotación que el Espíritu da a cada creyente a fin de capacitarlo para ser instrumento útil en la edificación de la iglesia. Los cristianos tenían que discernir entre lo que era una manifestación del Espíritu o de Satanás (vv. 1-3). El pasaje es trinitario, tanto en la entrega como en el uso de los dones. Éstos son diversos, pero todos ellos proceden del Espíritu (v. 4). Los dones capacitan para los ministerios, que son el resultado del ejercicio de un don; no puede haber ministerios sin dones que los respalden. Como servicio es Cristo quien lo determina (v. 5). El Padre actúa soberanamente produciendo el deseo de servir y dando el poder para hacerlo (Fil. 2:13) (v. 6).
No hay creyente sin dones. Tanto hombre como mujeres los reciben según determinación divina, pero no todos tienen los mismos dones. A unos el Espíritu dota con unos y a otros con otros, según lo que soberanamente determina [v. 8]. Pablo da una relación de nueve dones que no es exhaustiva. A unos palabra de sabiduría, para enseñar verdades bíblicas; a otros palabro de ciencia, para exhortar y amonestar; a otros distintos dones (vv. 9-10). Se dan soberanamente: Uno solo da, muchos reciben los dones. No es por méritos o deseos humanos, sino conforme al designio de Dios (v. 11).
Aplicación
Cada creyente tiene algún don, por tanto no hay disculpa alguna para servir. Los ministerios deben estar en mano de quienes han recibido el don que los hace aptos para edificar bajo el poder del Espíritu.
Pretender ejercer un ministerio sin el don, es una arrogancia que el Espíritu no puede bendecir. Los dones no son para engrandecimiento personal, sino para servir a los demás con ellos.
Reflexión: En la iglesia sobran grandes y faltan siervos.
Por : Samuel Pérez Millos
Domingo 14 DE JULIO DE 2024
Unidad y diversidad
1 Co. 12:12-31
La diversidad de dones es necesaria a causa de la diversidad de miembros en la iglesia, que es un cuerpo en Cristo.
Exposición
Muchos que son uno. Usando el ejemplo del cuerpo humano en donde hay muchos miembros con distintas funciones para formar una unidad en la pluralidad, hace la aplicación a la iglesia. Los creyentes han sido bautizados por el Espíritu en o hacia Cristo, es decir, nos sumerge en Cristo para vincularnos a Él que es la Cabeza en un cuerpo del que todos somos parte (vv. 12-13). Sería no solo absurdo sino imposible que existiera un cuerpo con un solo miembro. Cada uno, con distinta función, permite la realidad de unidad en la diversidad. Así como en el cuerpo los miembros asumen su lugar y función, así también en la iglesia (vv. 15-16).
Ningún miembro en el cuerpo es imprescindible, pero todos son necesarios, necesitando cada uno de las funciones de los demás. A los más débiles, en lugar de menospreciarlos se les presta mayor ayuda (vv. 17-24). Esta funcionalidad conduce a que “no haya desavenencia en el cuerpo” (v. 25). El ejemplo permite a Pablo aplicarlos a la iglesia, en donde los miembros se aman, duelen y ocupan unos de otros (v. 26). A cada salvo dotó Dios de lo necesario para que pueda ayudar a los otros. La lista de dones concluye con preguntas reflexivas para enseñar que no todos tenemos un mismo don. Algunos pretenden que alguno se manifieste en todos como evidencia de salvación, contradiciendo la enseñanza del apóstol (vv. 29-31).
Aplicación
La unidad entre los miembros hace posible el funcionamiento del cuerpo de creyentes que es la iglesia. La arrogancia produce efectos desastrosos, cuando los dones se ejercen como camino al engrandecimiento personal. De ahí que muchos quieran liderar, pero pocos deseen servir. La contención por ocupar los lugares más destacados en la iglesia, es el camino a la ausencia de bendición, porque Dios solo da gracia a los humildes, mientras resiste a los soberbios.
Reflexión: ¿Deseo los dones más útiles o los más llamativos?
Por : Samuel Pérez Millos
Lunes 15 DE JULIO DE 2024
El camino más excelente
1 Co. 13:1-7
Los corintios se vanagloriaban de los dones. Pero el apóstol les enseña la excelencia que sobre ellos tiene el amor.
Exposición
Dones y vida sin amor. Usando una suposición se refiere al uso de un don, en este caso las lenguas sin amor. Este era uno de los más apreciados en Corinto. La consecuencia es que en lugar de algo provechoso se convierte en algo molesto (v. 1). Luego se refiere a otros dones, el de profecía, de gran importancia en tiempos apostólicos como instrumento para revelar lo que estaba oculto en Dios, el misterio divino; después el de ciencia en plenitud toda la ciencia; también todo lo fe, de modo que pudiera hacer los milagros más grandes. Pasa luego de los dones a la filantropía, al dar los bienes a los pobres y aún la propia vida. Pero, sin amor nodo es, de nodo sirve (vv. 2-3).
La naturaleza del amor. El apóstol pasa a describir el carácter y comportamiento del amor. Es sufrido, capaz de soportar cualquier ofensa sin caer en la ira. Es benigno, usando la gentileza y la amabilidad. No tiene envidia, gozándose cuando otros alcanzan una posición más notoria. No es jactancioso, porque no desea ser reconocido y alabado. No se envanece, cualidad de quien no es arrogante. No hoce nada indebido, al no tener un comportamiento indecoroso. No busca lo suyo, porque es desinteresado. No se irrito, no es irascible. No guardo rencor, ya que no tiene en cuenta el mal recibido. Es capaz de sufrir todo. No es suspicaz, creyendo siempre en la disculpa que recibe. Todo lo espera y todo lo soporta, porque es perseverante.
Aplicación
El amor orientó la vida de Jesús y es el motor dinámico de la vida cristiana. La identificación con Cristo convierte el amor en la identificación ante el mundo de esa realidad (Jn. 13:35). En ocasiones levantamos un altar a la doctrina y quemamos en el amor.
Reflexión: Cualquier ministerio sin amor es mero ruido que molesta a Dios y molesta a la iglesia.
Por : Samuel Pérez Millos
Martes 16 DE JULIO DE 2024
Temporalidad y perpetuidad
1 Co. 13:8-13
El apóstol pone de relieve una cualidad propia del amor, su perpetuidad. Los dones concluyen, mientras el amor perdura.
Exposición
La enseñanza. El pasaje se inicia con una comparación: mientras el amor nunca deja de ser, los dones cesarán. La evidencia es que nuestro conocimiento sigue siendo limitado y por tanto la enseñanza lo es también, pero llegará el día en que conformados plenamente a la imagen de Jesús conoceremos plenamente lo que ahora no nos es posible (w. 8-9). El momento será cuando vengo lo perfecto. Para algunos se refiere al canon bíblico, otros lo entienden como la segunda venida de Cristo, pero pudiera tratarse también del amor, es decir, cuando el amor se manifieste plenamente el énfasis cambiará de los dones a la vida plena en el amor (v. 10). Habrá un tiempo cuando el conocimiento limitado dará paso al pleno, sin duda en la presencia del Señor y lo que ahora se presenta en una visión limitada, se manifestará en toda su gloriosa plenitud (v. 13). Las virtudes permanecerán también, literalmente dice Pablo: Lo permanente es, pues, fe esperanzo y amor, estos tres cosas juntas, pero, lo más excelente de ellos es el amor. La fe permanece como dependencia eterna de Dios; la esperanza como seguridad de nuevas maravillas que Él revelará; pero el amor impulsa la fe y es base de la esperanza.
Aplicación
No es posible una vivencia plena de la vida cristiana sin amor. La evidencia de la conversión y del nuevo nacimiento descansa en la capacidad de amar a los hermanos (1 Jn. 3:4). Como Dios no podría existir si dejase de amar, así tampoco nosotros podemos sustentar el testimonio de vida sin amor. Los dones que ahora nos ocupan, cesarán al no ser necesarios, pero el amor tomará forma y dimensión plena al cumplirse el propósito para el que fuimos destinados: ser hechos conformes a la imagen de Jesús (Ro. 8:29).
Reflexión: El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. (1 Jn. 4:8)
Por : Samuel Pérez Millos
Miércoles 17 DE JULIO DE 2024
El don de lenguas
1 Co. 14:1-9
Los corintios consideraban el don de lenguas superior a otros dones. incluyendo el de profecía. Pablo corrige ese error.
Exposición
Advertencias y precisiones. Al camino a seguir que es el amor, y a un anhelo lícito por los dones espirituales, debe haber una preferencia por la profecía. La razón es sencilla: Las lenguas no edifican sin traducción, mientras que la profecía edifica a los creyentes, los exhorta y los consuela (vv. 1-3). Por tanto, el que habla en lenguas se edifica a sí mismo, mientras que el que profetiza edifica a la iglesia (v. 4). Una precisión importante: El término lenguas en todo el texto griego del Nuevo Testamento, equivale a idiomas. El don permitía hablar en otro idioma sin haberlo conocido antes. En segundo lugar, el término profecía en el pasaje se refiere a palabra para edificación, exhortación y consolación. En cuanto a nuevas revelaciones no está operativo hoy, puesto que todas ellas están recogidas en el Nuevo Testamento, al que no puede añadírsele nada más. El don de lenguas sin traducción no edifica, de ahí que sea necesario que se interprete, de lo contrario no aprovecha (vv. 5-6). Mediante el ejemplo de instrumentos cuyos sonidos pueden distinguirse, y de la trompeta que debe dar un sonido preciso en el combate, así también, si se habla en otro idioma y nadie entiende, el mensaje es inútil. Podrá ser admirable pero no deja de ser incomprensible. Quien habla en lenguas sin que el auditorio entienda, convierte el mensaje en algo vano, como si hablase al aire, perdiendo el propósito que es la edificación (vv. 7-9).
Aplicación
Las lenguas son un don del Espíritu, por tanto, no todos pueden tenerlo. Los dones espirituales son dados para la edificación de la iglesia, de modo que cualquier ministerio que no cumpla ese propósito, no esta impulsado por el Espíritu. Pablo enseña el uso preferente de la profecía, que cumple tres funciones: edificar, exhortar y consolar. La iglesia ha de dar prioridad a la formación y enseñanza de los creyentes.
Reflexión: No hagamos nada que no edifique.
Por : Samuel Pérez Millos
Jueves 18 DE JULIO DE 2024
Propósito del don de lenguas
1 Co. 14:10-25
En la enseñanza sobre el don de lenguas, se dan los objetivos que justificaban su uso en la iglesia.
Exposición
Razón y utilización. El apóstol da una serie de observaciones para que los corintios entiendan bien la enseñanza. Hay diversidad de idiomas en el mundo, cada una de sus palabras tienen significado, pero quien no pueda entenderlo, idioma convierte en extraños a los dialogantes (vv. 10-11). Sr en la congregación se habla en una lengua que los oyentes no entienden, el discurso carece de valor (v. 12). Pablo pone el ejemplo de quien ora en lenguas, si no entiende el significado, su espíritu podía ser instrumento en manos del Espíritu pero quedaba sin fruto al no beneficiar a otros (vv. 13-14). Ei uso del don debía ser controlado por el que lo poseía, porque no es el ejercicio de un derecho, sino el bien de los demás (w. 15-17). El apóstol hablaba en idiomas más que muchos en Corinto, pero en la congregación estaba interesado en hablar menos pero ser comprendido por todos (vv. 18-19). Ei uso del don sin interpretación y masivamente, en lugar de testimonio era tomado como una manifestación de locura colectiva (v. 23). En cambio la enseñanza por medio de la profecía, alcanzaba los corazones incrédulos y los conducía a la conversión (vv. 24-25).
Aplicación
Los llamados dones carismáticos, entre el que están las lenguas. no tienen misión formativa sino demostrativa. Pretender usarlos en la iglesia como si fuesen destinados a la edificación de los creyentes es del todo improcedente. No es buena forma de culto la que da de lado el entendimiento para magnificar un espiritualismo que puede no ser movido por el Espíritu. Si el tiempo usado en aparentes manifestaciones espiritualidad se ocupara en enseñar la Biblia las bendiciones serían evidentes y las conversiones ocuparían el lugar de las convicciones.
Reflexión: El culto-espectáculo no es expresión de culto, sino de carnalidad.
Por : Samuel Pérez Millos
Viernes 19 DE JULIO DE 2024
Orden en el culto
1 Co. 14:26-40
Los desórdenes en el culto eran evidentes y requerían urgente corrección, de ahí las instrucciones del pasaje.
Exposición
Problemas en el culto. La reunión de Iglesia debe ser participativa y edificante. Los creyentes debían venir dispuestos a participar en la reunión, bien con cánticos, bien con enseñanza, con lenguas o con interpretación. Todo ello para edificación (v. 26). El ministerio de los dones no podía impedirse en la iglesia, pero algunos abusaban de esa libertad, como eran los que hablaban en lenguas. Este don requería una participación limitada, dos o tres; ordenada, por turno; y requería un intérprete. En caso de que no lo hubiera, debía callar, es decir no podía ejercer el don (vv. 27-28). Lo mismo ocurría con los profetas, el número de participantes en el culto serían dos o tres; si otro recibía una revelación había de esperar a que concluyera el que estaba hablando. No cabía disculpa alguna para interrumpir o hablar al mismo tiempo, porque debían tener control de ellos mismo (vv. 29-32). Parece ser, por el contexto, que las mujeres formulaban preguntas en el culto público interrumpiendo la reunión, a ellas les ordena que cesen en preguntar, y que estén collados en el culto, en ese sentido, para evitar desórdenes, que aquí dice que es indecoroso. S: necesitaban preguntar algo que no habían entendido podían hacerlo en casa a sus esposos (vv. 33-36). La conclusión final es lógica, corregir las deficiencias para que el culto se celebre decentemente y con orden (v. 40).
Aplicación
El culto libre es bueno para creyentes espirituales, pero puede ser un desastre para quienes usan ese tiempo como plataforma para hacer lo que de otro modo no se les hubiera permitido. Quien es espiritual, conducido por el Espíritu, busca un funcionamiento ordenado y edificante. En el culto no es para exhibir dones, o formular preguntas, sino para adorar ordenadamente a Dios en Espíritu y en verdad.
Reflexión: El culto debidamente ordenado no es contrario a la libertad del Espíritu, sino que la hace manifiesta.
Por : Samuel Pérez Millos
Sábado 20 DE JULIO DE 2024
La resurrección proclamada
1 Co. 15:1-11
En la iglesia había algunos que negaban la resurrección de los muertos (v. 12). El apóstol reitera la verdad que había enseñado.
Exposición
La doctrina del evangelio. Mediante un resumen sintetiza las verdades fundamentales del evangelio que les había sido predicado, y en las que los verdaderos cristianos perseveraban firmes. En esta verdad eran salvos progresando de la justificación a la santificación y esperando la glorificación (vv. 1-2). La verdad fundamental del evangelio es que Cristo murió como sacrificio expiatorio por el pecado, sustituto vicario de cada creyente (v. 3). El evangelio proclama también su muerte real ya que fue sepultado (v. 4). La tercera verdad como sustento de fe es que resucitó al tercer día. Todo esto se produjo conforme a lo anunciado proféticamente en las Escrituras. Testimonio. Cristo resucitado se apareció a Pedro, también a los otros apóstoles, sus apariciones alcanzaron a más de quinientos hermanos juntos. En el momento de escribir había muchos que aún vivían y podían testificar de la resurrección (vv. 5-6). La última referencia es la de él mismo, luego de mencionar a Jacobo. Él había perseguido a los cristianos y negaba, como fariseo la resurrección de Jesús, de ahí que su testimonio es sumamente importante. El Señor se le apareció en el camino a Damasco, rodeado de gloria (vv. 7-9). Sí no hubiese resucitado no habría salvación para él, ni provisión de gracia que le fortalecía para trabajar en el evangelio denodadamente. No eran sus fuerzas sino las de Dios en Él.
Aplicación
La Resurrección es una doctrina fundamental. Quien no cree que Jesús haya resucitado, niega la verdad esencial de la salvación, ya que Él fue entregado por nuestros pecados, pero resucitado para nuestra justificación. El resucitado Señor es la fuente de poder para la vida cristiana, para los recursos de la gracia y para la esperanza de gloria (Col. 1:27).
Reflexión: No es importante lo que yo haga para el Señor, sino lo que él es capaz de hacer por medio de mí.
Por : Samuel Pérez Millos
Domingo 21 DE JULIO DE 2024
Si Cristo no hubiese resucitado
1 Co. 15:12-19
El párrafo está destinado a refutar a quienes negaban la resurrección, ya que si no la hubiese, Cristo no habría resucitado.
Exposición
La enseñanza del apóstol. La resurrección de Cristo era parte esencial en la predicación del evangelio. Pero en la iglesia había quienes negaban la resurrección de los muertos. Tal vez entendían que era un asunto espiritual que se producía al creer, al pasar de muerte o vida. Ahora bien, sin resurrección no se puede admitir la de Cristo, porque Jesús era un hombre (vv. 12-13). Si el Señor no hubiese resucitado el mensaje del evangelio sería vano al quedar sin base de salvación, por tanto, también la fe sería vana, y su sacrificio no sería eficaz para salvar (v. 14). La segunda consecuencia sería la de un testimonio falso de la peor clase porque los testigos estarían atribuyendo a Dios un hecho que no se había producido, ya que si los muertos no resucitan la de Jesús sería una falsedad (v. 15). En tercer lugar, no habría salvación; la fe que antes quedaba despojada de contenido, quedaría también sin fruto, porque nadie que creyese podía recibir la vida eterna, al ser imposible la justificación (vv. 16-17; Ro. 4:25). En relación con los creyentes que mueren abrazando una fe que no salva, están perdidos (v. 18). Sin la resurrección de Cristo la esperanza es temporal, solo para el tiempo presente, y trae aparejada una vida miserable ya que los cristianos sufrían por una fe que solo es una ficción. Si la esperanza es para esta vida, no merece la pena y convierte al cristiano en el más miserable de los hombres (v. 19).
Aplicación
Cristo es la razón, meta y esperanza del creyente. El cristiano vive en esperanza porque vive a Cristo. La resurrección del Señor permite nuestra identificación con Él. La salvación no es promesa de Cristo, sino que se alcanza en Él mismo. La identificación con el Resucitado cambia radicalmente el modo de vida, al hacerse Cristo vida en el cristiano (Gá. 2:20). La esperanza no es por Cristo, sino que es Él mismo (Col. 1:27).
Reflexión: No creer en la resurrección es buscar entre los muertos al que vive.
Por : Samuel Pérez Millos
Lunes 22 DE JULIO DE 2024
La esperanza cristiana
1 Co. 15:20-34
La resurrección de Cristo condiciona la vida del creyente, afirma la esperanza y orienta la conducta en el presente.
Exposición
La enseñanza del apóstol. El pasaje se abre con una contundente afirmación: Cristo ha resucitado. Esta resurrección es como arras o prototipo de las que han de venir. Primicias era el primer manojo de fruto de la cosecha que se presentaba al sacerdote, como anticipo de la que iba a segarse (Lv. 23:11). Jesús es el primogénito de entre los muertos (Col. 1:18), ejemplo de cómo será la resurrección de los creyentes (Fil. 3:21). Pablo habla de un orden en la resurrección: Primero Cristo, luego los que son de Cristo en su venida, antes de que ocurra el fin de todo este sistema actual (vv. 20-24). El Señor resucitado recibió la suprema autoridad y poder de modo que todos los enemigos que se oponían a Dios serán arrojados al lago de fuego (Ap. 20:9). La muerte también desaparecerá para el salvo (vv. 25-26). La función mediadora del Señor de restituir todo bajo la autoridad divina, habrá cumplido el propósito establecido por Dios, que será todo en todos (vv. 25-28). El apóstol llama a una firmeza en la esperanza. Los conflictos, peligros y la muerte se sobrellevan por la realidad gloriosa que ya poseemos en el que murió y resucitó, de lo contrario no tendría sentido (vv. 29-32). El pasaje se cierra con una advertencia: La mala enseñanza o mejor, las malas compañías de los falsos maestros son corruptoras, por tanto el apóstol exhorta a velar debidamente (vv. 33-34).
Aplicación
El creyente debe permanecer firme en la doctrina bíblica, desechando todo aquello que contradiga la verdad general de la Palabra. La mejor defensa contra el engaño es apartarse de los engañadores (2 Jn. 10-11). Cada uno firme en la esperanza de gloria que es Cristo en nosotros, podemos afrontar las dificultades, pruebas y tristezas como algo temporal, mientras nuestros ojos se centran en la gloria eterna que anhelamos.
Reflexión: Esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria.
Por : Samuel Pérez Millos
Martes 23 DE JULIO DE 2024
El cuerpo de resurrección
1 Co. 15:35-50
Algunos cristianos en Corinto tenían dudas sobre como sería el cuerpo de resurrección. El apóstol enseña sobre esto.
Exposición
El cuerpo de resurrección. Pablo responde a una supuesta pregunta sobre como resucitarán los muertos mediante ejemplos tomados de la naturaleza. Una semilla que se introduce en la tierra se descompone y deja de ser semilla para transformarse en una nueva planta. Ese pro-ceso está bajo la soberanía divina, que determinó diversidad de cuerpos con diferentes características (vv. 35-41). Así ocurre con la resurrección. Se entierra un cuerpo corruptible y resucitará uno incorruptible, que no solo está libre de corromperse, sino que no puede ser afectado por la corrupción (v. 42). El cuerpo en deshonro, de la humillación nuestra (Fil. 3:21), dará paso a uno glorioso (v. 43). Se pondrá en tierra cuerpo animal, con las limitaciones propias de esta naturaleza, carne y sangre, dolor y decadencia, necesidades vitales; resucitará con la libertad de uno espiritual, que sin ser espíritu, será semejante al del Señor resucitado (v. 44). La vinculación con el primer hombre, trae la consecuencia de limitación terrenal y de pecado; la identificación con Cristo, el segundo hombre, nos trasladará a la experiencia de la libertad gloriosa de los hijos de luz (vv. 45-49). Lo que es corruptible no puede entrar en un ambiente de incorrupción, de modo que tiene que ser cambiado para el eterno disfrute del reino de Dios (v. 50).
Aplicación
Lo que el apóstol describe escapa a la comprensión y cono-cimiento actuales. Las lágrimas de la peregrinación, los sufrimientos del camino, los desprecios del mundo, la enfermedad, la vejez y la muerte, quedan reducidas a algo pasajero, que dejan de tener valor ante la gloria que esperamos. La casa terrenal se deshace con el tiempo, pero ya vislumbramos al final del camino la permanente morada eterna. Podemos estar seguros porque esa es la promesa de Jesús (Jn. 14:1-4).
Reflexión: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman.
Por : Samuel Pérez Millos
Miércoles 24 DE JULIO DE 2024
La victoria en Cristo
1 Co. 15:51-58
La enseñanza sobre la resurrección concluye con el creyente revestido de inmortalidad.
Exposición
El modo en que se producirá. Dios revela un misterio, algo que solo de este modo es conocido. No todos los creyentes pasaremos por la experiencia de la muerte, pero todos seremos transformados. El modo de la transformación será instantáneo, en un momento; será inminente o lo final trompeta; será soberano, por determinación divina; tendrá un alcance: los muertos resucitados y los creyentes transformados (vv. 51-52). Será una operación necesaria, ya que es preciso que se produzca la transformación de los cuerpos, como enseñó antes (v. 53). Cuando esa acción de la omnipotencia divina tenga lugar, se cumplirán las profecías que anuncian la derrota definitiva de la muerte. Desde ahí no será la victoriosa, sino la derrotada. La resurrección absorberá, tragará, el poder de la muerte (v. 54). Podemos anticipar el triunfo final sobre ella que ya no tendrá el aguijón mortal, y sobre el efecto que causa, porque ya el sepulcro quedará vacío e inútil (vv. 55-56). Toda esta admirable victoria es una obra de Dios. El creyente debe manifestar su gratitud al que la hizo posible (v. 57). La exhortación final comprende a todos: así que hermanos. Tres demandas en ella: firmeza, frente a las verdades bíblicas, sin dejarse mover por especulaciones; constancia, inconmovibles en la esperanza de la resurrección; crecimiento, ya que la seguridad debe traer consigo el compromiso de un servicio pleno (v. 58).
Aplicación
El trabajo que no es vano es el que se hace en el Señor, que equivale a hacerlo en su poder. Es solamente Él quien tiene poder para obrar con más abundancia de lo que pudiésemos pedir (Ef. 3:20). Es un servicio bendecido porque busca su gloria en sujeción y dependencia. En la resurrección veremos que ningún trabajo en Cristo ha quedado estéril.
Reflexión: La fe que se afirma en la resurrección y la esperanza que sustenta la realidad del futuro, son el incentivo necesario para servir con ánimo en el presente.
Por : Samuel Pérez Millos
Jueves 25 DE JULIO DE 2024
Enseñanza, informes y despedida
1 Co. 16:1-24
Con este pasaje concluye la epístola. Pablo dedica las últimas líneas a tratar temas prácticos y a despedirse de los lectores.
Exposición
La ofrenda. Respondiendo a una consulta trata del modo de ofrendar. Aunque concretamente esa tenía como destino los hermanos necesitados, es un sacrificio espiritual que se ofrece a Dios y que se aplica a las necesidades de su obra (Fil. 4:18). La ofrenda ha de hacerse con regularidad: codo primer día de lo semana; debe ser individual codo uno de vosotros; también comprometida: pongo algo aporte; y proporcional: según hoyo prosperado (vv. 1-2).
Informes. Pablo presenta sus planes de viaje avisándoles de su visita, con la posibilidad de una larga estancia (vv. 5-7). Les informa también de la puerta eficaz que Dios abrió para predicar el evangelio en Éfeso, a pesar de los adversarios (vv. 8-9).
Indicaciones y saludos. Timoteo era un colaborador de carácter tímido, por lo que pide que esté con ellos con tranquilidad, además debían ofrendarle para el viaje de regreso (vv. 10-11). Les informa que Apolos los visitaría cuando le fuese posible (v. 12). También les exhorta a ser vigilantes, mantener firmeza en la fe y esforzarse en la obra (v. 13). Todo cuanto hiciesen debía estar impulsado por el amor (v. 14). Les pide también sujeción a quienes trabajan en la obra a pleno tiempo (v. 17). Finalmente unas líneas personales con la solemne advertencia sobre el amor hacia el Señor Jesucristo, la esperanza de su venida, y la bendición cierran el escrito, con su despedida llena de amor en Cristo para todos los creyentes (vv. 21-24)
Aplicación
Todos debiéramos investigar si nuestras vidas se desarrollan conforme a las demandas de la epístola. Un buen examen sobre la comunión con los hermanos, la limpieza personal, la madurez espiritual y el compromiso con la Palabra, nos llevará a la disposición que renueve la comunión con el Señor.
Reflexión: Dios nos llama a ser más que vencedores en Jesús.
Por : Samuel Pérez Millos
Viernes 26 DE JULIO DE 2024
Consolados para consolar
2 Corintios 1:1-7
Pablo empieza la carta con su salutación apostólica (vv. 1-2) para luego hablar sobre la dialéctica entre el sufrimiento y la consolación en la vida cristiana (vv. 3-7).
Exposición
salutación (vv. 1-2). Como en todas las cartas de Pablo, empezamos con una salutación. El joven Timoteo estuvo con el apóstol mientras éste redactaba la epístola (v. 1).
Sufrimiento y consolación (vv. 3-7). Pablo y Timoteo no vivían en una burbuja. Sabían que el ministerio cristiano conlleva sufrimiento, dolor y angustia. No obstante, al sufrir por el nombre de Cristo, podían gozarse de la bendición de recibir consuelo de parte del Señor. Algo importante que subrayar aquí es la diferencia entre el sufrimiento común y corriente y el sufrimiento propiamente cristiano. Todos sufrimos, tanto ateos como creyentes. Pero el sufrimiento que el Señor recompensa es el sufrir por su nombre, por amor a su Palabra. Es más que tener un dolor de cabeza o un malestar en el estómago; se trata de sufrir por causa del Evangelio. Pablo, sin embargo, era capaz de soportar las aflicciones porque tenía ciertas cosas bien claras en su mente. Primero, a pesar de sufrir tanto, Dios le consolaba (v. 4). Segundo, por medio de sus tribulaciones, podía luego apoyar a otros hermanos que estaban sufriendo por causa de la fe (v. 4). Tercero, al sufrir, llegó a sentir algo de la presencia de Cristo operando a través de él (v. 5). Muchos de nuestros hermanos perseguidos, a lo largo de la historia y en la actualidad, han testificado lo mismo: el sufrimiento por la causa de Cristo -de forma paradójica- produce fortaleza y valentía espiritual.
Aplicación
La pregunta que tenemos que hacernos hoy es la siguiente: ¿estamos sufriendo por la causa de Cristo? ¿De verdad vivimos como Dios nos manda en la sociedad? Porque si es así, tarde o temprano vamos a toparnos con enemigos y mil problemas. Los siervos de Dios tenemos que sufrir por amor a Cristo. Pablo enseñó a Timoteo que todos los que queremos vivir piadosamente en Cristo Jesús sufriremos persecución de alguna u otra forma (2 Tim. 3:12). Y si estamos sufriendo, ¿Cómo reaccionamos? ¿Con auto-compasión? ¿O vemos en las aflicciones una oportunidad de disfrutar del consuelo de Dios y de edificar a otros en la fe?
Reflexión: Si sufrimos, reinaremos con Él.
Unión Bíblica “Notas Diarias” Por : William Graham
Sábado 27 DE JULIO DE 2024
El amor de un apóstol
2 Corintios 1:8-14
Esta sección se divide en dos partes: la liberación que realizó Dios en la vida de Pablo (vv. 8-10) y el amor que el apóstol sentía por los hermanos de Corinto (vv. 11-14).
Exposición
El liderazgo de Pablo (vv. 8-10). Algunos falsos maestros se estaban oponiendo al apóstol Pablo en Corinto. Eran predicadores elocuentes, poderosos y algunos comentaristas resaltan que tenían unos cuerpos bien fuertes y musculosos. En fin, se gloriaban en lo físico, e imponían su voluntad a la congregación mediante estrategias agresivas. En vez de gloriarse en sus triunfos y logros, Pablo decide confesar sus debilidades y fracasos (algo que los súper ungidos de Corinto nunca hubieran hecho). Fue abrumado, perdió la esperanza de conservar la vida y tuvo en sí mismo sentencia de muerte. Pero con todo, la desesperación que sintió solo sirvió para impulsarle a ver el poder de la mano de Dios actuando sobre su vida (v. 10). Pasado, presente, futuro: Pablo sabía que Dios tenía el control.
El amor del apóstol (vv. 11-14). El apóstol reconoce que las oraciones de los corintios le ayudaron en su momento de angustia 11). La Biblia no cesa de recalcar que Dios obra por medio de la oración. Por lo tanto, Pablo tenía gratitud en el corazón por la intercesión de sus hermanos. Cuando sufrimos y oramos por una causa en común, nos sentimos mucho más unidos. Pablo acaba esta sección con unas palabras de amor comentando que “somos vuestra gloria así como también vosotros la nuestra, para el día del Señor Jesús” (v. 14). Esto es lo que hace el amor de Dios. Nos une con lazos de amor. Y es esta clase de amor la que nos lleva a andar con sencillez, sinceridad y la gracia de Dios en vez de gloriarnos en la carne.
Aplicación
¿Cuándo pasas por momentos de tribulación, pides oración? Y si ves que otro hermano en el Señor lo está pasando mal, ¿oras por él o ella? ¿Le das palabras de ánimo? ¿Le fortaleces en el Espíritu? A la luz de nuestro contexto contemporáneo, es importante distanciarnos de la teología de la prosperidad porque no nos per-mite confesar nuestros problemas. Uno de los gestos más bonitos en la familia cristiana es cuando oramos los unos por los otros.
Reflexión: Nuestras necesidades son tan profundas que no debemos cesar de orar hasta que estemos en el cielo. (Charles Spurgeon)
Por : William Graham
