Devocional hoy

Sábado 20 DE ABRIL DE 2024

Dios salva a judíos y gentiles igualmente

Romanos 9:19-33

En su soberbia el ser humano está convencido que si él ocupara el lugar de Dios, tomaría mejores decisiones, sería más justo con sus criaturas y haría en general mejor las cosas. El apóstol se encargará de cerrar la boca del hombre e instruirle acerca de las riquezas de la gloria de Dios que redundan en la bendición del género humano y la extraordinaria salvación de los pecadores tanto judíos como gentiles.

Exposición

Soberanamente (vv. 18-24). Pablo hace uso de una figura bíblica, la del alfarero, para poner los puntos sobre las íes. Dios es Dios, el santo, paciente y misericordioso Creador. El hombre no es más que polvo, una criatura forjada por la mano del Todopoderoso. Su voluntad soberna ha sido seleccionar y llamar a la salvación a un pueblo formado, igualmente, por judíos como por gentiles.

Por gracia (vv. 25-29). La salvación de los gentiles y su adopción a la familia de Dios ya había sido revelada en el pasado por los profetas. El Señor no hace más que seguir su plan anunciado. Por lo tanto la inclusión de los gentiles en el pueblo de Dios es por pura gracia pero también lo es, igualmente, la permanencia de un remanente de Israel.

Por medio de la fe (vv. 30-33). El apóstol concluye haciendo referencia a la justicia necesaria para salvación. Los gentiles la encontraron en Cristo y se la apropiaron por la fe. El Israel nominal tropezó en la piedra de tropiezo (Cristo) pero alcanzará la salvación, igualmente, todo israelita que crea en él (Cristo).

Aplicación

El propósito principal en la salvación es que Dios haga notorias “las riquezas de su gloria”. Es cierto que éstas se muestran en la creación y en su mano providente sobre la humanidad pero en ninguna acción es más notable la gloria de Dios que en la salvación inmerecida de hombres y mujeres caídos y perdidos. Las riquezas de su gloria quedan manifiestas cuando Dios entrega a su unigénito Hijo, cuando el Hijo mismo va a la cruz a recibir el castigo de nuestra paz, cuando el Espíritu Santo nos arroba son su visita y santifica. Finalmente las riquezas de su gloria serán contempladas por los redimidos eternamente.

Reflexión: Y tu pueblo, todos ellos serán justos, para siempre heredarán la tierra; renuevos de mi plantío, obra de mis manos, para glorificarme (Is. 60:21)..

Unión Bíblica “Notas Diarias” Por : Carlos Rodríguez