Conferencia Misionera Europea de las AAHH.
Por : Pedro Puigvert
Con el título Pasión por el Reino se ha celebrado esta conferencia en Dürres (Albania) del 26 al 30 de septiembre con la participación de 175 hermanos procedentes de 27 países europeos. De España asistimos 9, 7 de Cataluña, uno de Madrid y otro de Málaga, aunque a partir del 26 de septiembre este postrero ha empezado a servir al Señor en Roma. Los dos últimos actuaron como traductores. En principio la conferencia debía celebrarse en Bratislava (Eslovaquia), pero debido a la proximidad de Ucrania en estado de guerra se decidió trasladarla a Albania. La localidad de Dürres está a orillas del mar Adriático, un conocido sitio turístico donde proliferan los hoteles y resorts como el que ocupamos todos los participantes en la conferencia.
Los cinco últimos en llegar fuimos los de Barcelona que viajábamos en el mismo avión el cual salió del aeropuerto con una hora de retraso. Cuando llegamos a Tirana llovía copiosamente y en taxi fuimos al hotel tardando más de lo previsto por el mal tiempo y porque el taxista no sabía dónde estaba al hotel. Cuando llegamos e hicimos la inscripción ya estaban a punto de cerrar el comedor y la primera sesión que abría la conferencia ya se había iniciado a cargo de Simón Marshall del Reino Unido. Mientras él hablaba, su esposa sufrió un desmayo en el pasillo que daba acceso a la sala, llevándola al hospital en ambulancia y su marido se enteró de lo ocurrido cuando terminó la sesión. Pasó la noche en el hospital, pero regresó al día siguiente descartándose una dolencia que la mantuviera hospitalizada, ya que fue una lipotimia.
La estructura de la conferencia fue como sigue: por la mañana, después del desayuno, teníamos un tiempo devocional de 30 minutos con cánticos lectura de la palabra de Dios y oraciones. A continuación había dos exposiciones separadas por un tiempo de descanso para tomar un café, zumo de frutas y pastas. Eso daba lugar a intercambiar opiniones sobre lo escuchado formándose espontáneamente pequeños grupos alrededor de una mesa. Así llegábamos a la hora del almuerzo. Después de la comida había un tiempo libre hasta las 15,30 en que empezaban los talleres sobre diversos temas, hasta la cena. Después de cenar se celebraba la sesión de la noche que estaba dedicada a los reportajes sobre las iglesias y las actividades que hacían.
Las exposiciones de las mañanas se basaron en el libro de los Hechos de los apóstoles; el martes, capítulo 13; el miércoles, capítulo 16 y el jueves capítulo 20. La primera llevaba por título Cuando el Espíritu Santo habla, a cargo de Frederic Walraven de los Países Bajos; la segunda, Inspiración – El papel del Espíritu Santo en la obra del reino a cargo de Allan Mackinon del Reino Unido; La primera del miércoles, Ver y escuchar cosas nuevas por Peter Kozar de Eslovaquia; la segunda Visionando lo que nos muestra el Señor hoy por Andrzej Turkanik de Polonia; la primera del jueves El valor de mi vida a la luz de la obra por Frederic Walraven de los Países Bajos; la segunda Motivación – Terminar bien nuestra carrera por Miguel Wickham de España. En cuanto a los talleres, los había de diversos temas que agrupados fueron: sobre Misión; Apologética; Liderazgo; Valores y Ética; La Biblia, hoy; La Vida de la Iglesia. Dentro de Valores y Ética, Miguel Wickham dio el tema Cuidado de la creación y dentro de la Vida de la iglesia, Dámaris Playá de España presidió el de Iglesia y Sociedad. Con referencia a las sesiones de reportajes, el primero fue el de Albania y los Balcanes, presentado por Miroslav Cizmanski, un obrero del Señor eslovaco que sirve en el norte de Serbia donde hay una mayoría de población eslovaca. La sesión fue presidida por Samuel Penalva de España. La segunda sesión tenía a Ucrania como centro y la ayuda que se le ha enviado desde Moldavia, Rumania, Polonia e Italia. La sesión fue presidida por Peter Kozar de Eslovaquia. La última sesión versó sobre los jóvenes en diversos países. Todas las presentaciones se ilustraban con abundancia de material gráfico y videos. Llama la atención que en los países balcánicos donde el establecimiento de las Asambleas de Hermanos tuvo lugar después de la caída de la URSS, en los años 90, hay pocas iglesias, pero en la mayoría de ellas hay muchos jóvenes. Por otro lado, me ha sorprendido que mientras en España, cuando yo me convertí al evangelio en los años 60 del siglo pasado, había un fuerte sentimiento antiintelectual, cuando más ignorante más santo, en que los hermanos que querían prepararse bíblica y teológicamente para servir al Señor eran mal vistos si acudían a una Escuela Bíblica o a un Seminario. Por contra en esta conferencia, la mayoría de los que tomaron la palabra eran doctores y no precisamente en medicina.
El viernes 30 se cerró la conferencia con un culto de partimiento del pan y la última conferencia sobre Hechos 28 a cargo de Alfred Mustafa de Albania y la conclusión por Frederic Walraven de los Países Bajos, terminando con el almuerzo. En términos generales ha estado bien por todos los asuntos tratados. Como curiosidad, hemos descubierto que hay bastantes obreros que están sirviendo al Señor como misioneros. Por ejemplo, un hermano del Brasil es obrero en Bosnia, dos hermanos de la India estaban allí porque servían en algún país de Europa y también de Chile y como no un español ahora en Italia.